miércoles, 18 de noviembre de 2015

OVNIs en instalaciones militares

Los avistamientos de extraños objetos voladores no identificados dentro o cerca de dichas instalaciones suelen ser muy valorados por muchos ufólogos que los consideran como de gran extrañeza, ya que los testigos militares, según los susodichos, son de alto nivel y no suelen confundirse fácilmente. Sin embargo, la experiencia en el examen de estos sucesos dice otra cosa.

Un ejemplo lo tenemos en el incidente ocurrido en el Campamento militar Los Castillejos, Arbolí, Tarragona, en la noche del 2 de agosto de 1968. Por cierto, dicha instalación fue abandonada por el Ejercito en enero de 2001. Hacia las 23:44 horas locales del citado día se observó lo siguiente:

avistamiento en Los Castillejos, Tarragona 1968

Información tomada de la obra de Vicente-Juan Ballester Olmos y Juan A. Fernández Peris Enciclopedia de los encuentros cercanos con OVNIS, marzo 1987. Págs. 54-55


Grafico del avistamiento del campamento militar Los Castillejos 

Grafico tomado de la obra de Vicente-Juan Ballester Olmos OVNIS: El fenómeno aterrizaje, julio 1978. Pág. 62

Aunque el caso figura como aterrizaje o encuentro cercano, todo apunta a una confusión con un astro brillante que al ir descendiendo hacia su ocaso coincidió con el monte Gallicant, desde el punto de vista del campamento, creando la ilusión de un objeto luminoso flotando sobre dicho monte.

el cielo desde Los Castillejos, 2 de agosto de 1968

Mirando hacia el oeste, se encontraba en el cielo, a la hora del avistamiento, la brillante Arcturus con un acimut de 278º (situado algo a la derecha del oeste) y 19º de altura sobre el horizonte, con su típico color anaranjado/rojizo.

acimut de Acrturus el 2 de agosto de 1968

Trazando el acimut de Arcturus desde el campamento se comprueba que pasa por el monte Gallicant, encajando con la posición del pretendido OVNI. La desaparición del mismo se produjo unos minutos después por el ocultamiento del astro tras el citado monte.

Por otra parte, hay que señalar algunos errores en la información sobre este caso: La orientación del dibujo, mostrado más arriba, es incorrecta, ya que el monte Gallicant se encuentra hacia el oeste del campamento militar, no hacia el sur-suroeste. La distancia campamento/monte, en línea recta, es de casi dos kilómetros, no de 800 metros. En el primer dibujo, el OVNI se representa a la izquierda del monte y en el segundo, a la derecha, etc.

En definitiva, otro ejemplo de cómo una astro brillante del cielo nocturno puede convertirse, por una serie de ilusiones y percepciones erróneas, en un clásico aterrizaje OVNI.






4 comentarios:

Romanones dijo...

"En definitiva, otro ejemplo de cómo una astro brillante del cielo nocturno puede convertirse, por una serie de ilusiones y percepciones erróneas, en un clásico aterrizaje OVNI."
En definitiva, otro ejemplo de cómo -por intereses que nadie acierta a comprender- se puede explicar un avistamiento OVNI como nos salga de la faltriquera.

Ricardo Campo Pérez dijo...

En definitiva, otro ejemplo más de cómo a los anónimos romanonescos se les hace un nudo el ano cada vez que cae un caso con recinto militar por en medio. El mundo magufo y su racionalidad a la carta.

Federico dijo...

En el blog cuyo enlace ponen ustedes en el primer párrafo del artículo, Leopoldo Zambrano -su autor- escribe lo siguiente:

"Un piloto aviador, un político, un policía o un astronauta, no son expertos en objetos desconocidos, pero pueden ser considerados como buenos observadores por su preparación o por lo que conocen, sin embargo eso no los pone necesariamente por encima de un ciudadano común a la hora de describir un no identificado.
Si acaso, por su conocimiento, pueden decir qué es lo que no era, pero nunca lo que fue realmente. Empero, al exponer lo que no pudo haber sido, dejan un gran margen de lo que sí pudo ser, y esto abarca desde un dragón medieval hasta una nave nodriza con seres morados llevando a cuestas varias vacas."

Es decir, que cuanta mayor es la formación o la experiencia de una persona, más fiabilidad tienen sus aseveraciones de que lo visto no era el Sol, la Luna, o las estrellas. Claro que nunca podrán decir "qué era", pero sí "qué no era". Eso queda claro en la mayoría de los informes. Y ése es el terreno donde la Ciencia, la verdadera Ciencia, debe investigar. Y estoy seguro de que lo hace.


Leer más: http://meditacionesdeunfumador.blogspot.com/2015/04/los-mejores-testigos.html#ixzz3s3Qg4100

Juan Carlos Victorio dijo...

Ya, pero aunque un testigo diga "qué no era" lo que observó siempre se dejará alguna cosa y ahí entran en juego las pistas y las evidencias, que apuntarán hacia una explicación.