Los días 21, 22 y 23 de diciembre de 1965, desde las 17:00 hasta las 20:30 horas locales, fue visto (y fotografiado) sobre los cielos de Huesca un foco luminoso que según los más afamados ufólogos españoles, se trataba de un ovni o “una de estas naves, emitiendo una extraordinaria luminosidad."
Iker Jiménez, refiriéndose a este caso escribe:
“El año 1965 se despidió, ufológicamente hablando, con un avistamiento múltiple de carácter excepcional.”
(Encuentros: la historia de los ovnis en España, Madrid, mayo 2002. Pág. 50) (el resaltado es mío)
En: Platillos volantes ante la cámara, Ed. Pomaire, Barcelona 1969, pp. 188-191, Antonio Ribera también cita este caso. Pero la encuesta más amplia que se puede leer sobre esta observación se encuentra aquí.
Como quería conocer ciertos detalles, que faltaban en la información publicada sobre el avistamiento, localicé a Ángel Gari y César Valero y, en conversación telefónica, me facilitaron datos que, en las referencias señaladas anteriormente, algunos no se mencionan y otros son erróneos. También, me dieron varias pistas significativas para explicar la observación.
Según relata el Sr. Gari, venía de Jaca hacia Huesca, en coche, con sus padres y un familiar (Ramón Abadía). A unos 25 kilómetros de la capital vieron un extraño objeto luminoso sobre la Sierra de Gratal (Hay que señalar que lo vieron todos menos Ángel Gari, que es ciego). Cuando llegaron a Huesca avisaron al fotógrafo César Valero. Éste se dirigió, con su equipo fotográfico, al domicilio de Gari, ubicado en la calle Coso Alto, nº 57 (actualmente es el 77), y desde allí se obtuvieron las fotografías del supuesto ovni. Le pregunto a Ángel Gari sobre la orientación del mirador, desde donde se sacaron las fotos, y me contesta que miraba hacia el Sur-oeste.
Dice, también, que en aquella época no había tantos fenómenos en el cielo que indujeran a confusión y que se pensó que podría tratarse de una nave nodriza porque en una de las fotografías salía una línea del núcleo principal. Además, hubo interferencias de radio que relacionaron con el supuesto ovni. El suceso no tuvo mucha repercusión (cree que el caso no se publicó en la prensa) y quedó como una cosa anecdótica.
César Valero explica que han transcurrido muchos años y ya no recuerda la observación ni las tomas fotográficas. Lo que sí recuerda es que utilizó película de 35 mm en blanco y negro. Comenta que el objeto luminoso podría ser una nave nodriza y la rayita que se ve en una de las fotografías igual fue por un movimiento de la cámara. Preguntado sobre la orientación del objeto luminoso, contesta que el ovni, mirando desde la vivienda de Gari, se veía sobre el monte San Jorge. El mencionado cerro está situado a un kilómetro, más o menos, de la calle Coso Alto y en dirección Sur-oeste.
Después de tener una serie de datos sobre la mesa, el siguiente paso fue averiguar que vieron y fotografiaron los observadores. En la información disponible sobre el caso se habla de un objeto luminoso visible en el cielo desde el atardecer hasta las 20:30 horas, durante varios días seguidos. Esta referencia es, por sí sola, bastante reveladora y sugiere la presencia de un astro en el firmamento. Así que, compruebo el cielo de los días 21 al 23 de diciembre de 1965, entre las horas indicadas, y ,sorpresa, aparece nuestro viejo conocido: ¡El planeta Venus!
El citado astro era visible después de la puesta del Sol hasta su ocaso, que acontecía sobre las 20:44 horas. Como vemos, coincide con la visibilidad del misterioso foco. A las 19:00 horas locales (GMT+1) del día 22, Venús tenía un azimut de 46º 49’ (visible por el Sur-oeste) y unos 15º de altura sobre el horizonte.
“El año 1965 se despidió, ufológicamente hablando, con un avistamiento múltiple de carácter excepcional.”
(Encuentros: la historia de los ovnis en España, Madrid, mayo 2002. Pág. 50) (el resaltado es mío)
En: Platillos volantes ante la cámara, Ed. Pomaire, Barcelona 1969, pp. 188-191, Antonio Ribera también cita este caso. Pero la encuesta más amplia que se puede leer sobre esta observación se encuentra aquí.
Como quería conocer ciertos detalles, que faltaban en la información publicada sobre el avistamiento, localicé a Ángel Gari y César Valero y, en conversación telefónica, me facilitaron datos que, en las referencias señaladas anteriormente, algunos no se mencionan y otros son erróneos. También, me dieron varias pistas significativas para explicar la observación.
Según relata el Sr. Gari, venía de Jaca hacia Huesca, en coche, con sus padres y un familiar (Ramón Abadía). A unos 25 kilómetros de la capital vieron un extraño objeto luminoso sobre la Sierra de Gratal (Hay que señalar que lo vieron todos menos Ángel Gari, que es ciego). Cuando llegaron a Huesca avisaron al fotógrafo César Valero. Éste se dirigió, con su equipo fotográfico, al domicilio de Gari, ubicado en la calle Coso Alto, nº 57 (actualmente es el 77), y desde allí se obtuvieron las fotografías del supuesto ovni. Le pregunto a Ángel Gari sobre la orientación del mirador, desde donde se sacaron las fotos, y me contesta que miraba hacia el Sur-oeste.
Dice, también, que en aquella época no había tantos fenómenos en el cielo que indujeran a confusión y que se pensó que podría tratarse de una nave nodriza porque en una de las fotografías salía una línea del núcleo principal. Además, hubo interferencias de radio que relacionaron con el supuesto ovni. El suceso no tuvo mucha repercusión (cree que el caso no se publicó en la prensa) y quedó como una cosa anecdótica.
César Valero explica que han transcurrido muchos años y ya no recuerda la observación ni las tomas fotográficas. Lo que sí recuerda es que utilizó película de 35 mm en blanco y negro. Comenta que el objeto luminoso podría ser una nave nodriza y la rayita que se ve en una de las fotografías igual fue por un movimiento de la cámara. Preguntado sobre la orientación del objeto luminoso, contesta que el ovni, mirando desde la vivienda de Gari, se veía sobre el monte San Jorge. El mencionado cerro está situado a un kilómetro, más o menos, de la calle Coso Alto y en dirección Sur-oeste.
Después de tener una serie de datos sobre la mesa, el siguiente paso fue averiguar que vieron y fotografiaron los observadores. En la información disponible sobre el caso se habla de un objeto luminoso visible en el cielo desde el atardecer hasta las 20:30 horas, durante varios días seguidos. Esta referencia es, por sí sola, bastante reveladora y sugiere la presencia de un astro en el firmamento. Así que, compruebo el cielo de los días 21 al 23 de diciembre de 1965, entre las horas indicadas, y ,sorpresa, aparece nuestro viejo conocido: ¡El planeta Venus!
El citado astro era visible después de la puesta del Sol hasta su ocaso, que acontecía sobre las 20:44 horas. Como vemos, coincide con la visibilidad del misterioso foco. A las 19:00 horas locales (GMT+1) del día 22, Venús tenía un azimut de 46º 49’ (visible por el Sur-oeste) y unos 15º de altura sobre el horizonte.
Testigos ubicados a unos 25 Kms. de Huesca y azimut de Venus a las 18:00 horas
El mirador de la vivienda del Sr. Gari (desde donde se sacaron las fotografías) está orientado hacia el Sur-oeste. Además, si trazamos el azimut del planeta desde ese punto (ver mapa) comprobaremos que pasa por encima del monte San Jorge, zona por donde era visible el ovni.
Azimut de Venus a las 19:00 horas
En una de las referencias se muestra un dibujo del ovni con forma triangular, un foco interno y diversos colores en la periferia. Suele ser típico, cuando se observa un astro con prismáticos, percibir distorsiones de la imagen (cambios de forma) debido a la turbulencia atmosférica (el problema se acentúa si el astro está cerca del horizonte) y ver otros colores (que no se aprecian a simple vista) gracias a la aberración cromática de las lentes.
Por otra parte, resultan chocantes, por razones obvias, algunos comentarios vertidos en uno de los artículos mencionados al principio:
“...Todos lo vimos a simple vista y con prismáticos...”
“El objeto –según testimonio de Gari Lacruz- parecía un cono luminoso...”
Sobre las tomas fotográficas apenas hay datos y son perfectamente compatibles con una exposición de Venus.
No pongo en duda la autenticidad de los documentos gráficos:
“Me consta, puesto que conozco a Ángel Gari, que los presentes testimonios gráficos son absoluta y rigurosamente auténticos.”
Lo que cuestiono es la interpretación que se hizo y se hace de esas imágenes:
“En ellos puede apreciarse una de estas naves, emitiendo una extraordinaria luminosidad.”
Y, además, propongo una solución al caso.
Después de examinar los datos que hay sobre el suceso, mi conclusión es: ¡Los testigos vieron y fotografiaron el planeta Venus!
Este es otro ejemplo característico de cómo se investigan este tipo de sucesos. Se recoge información incompleta, a veces errónea, se da por buena la confusión del observador y se concluye que se ha visto un ovni o una nave.
Por otra parte, resultan chocantes, por razones obvias, algunos comentarios vertidos en uno de los artículos mencionados al principio:
“...Todos lo vimos a simple vista y con prismáticos...”
“El objeto –según testimonio de Gari Lacruz- parecía un cono luminoso...”
Sobre las tomas fotográficas apenas hay datos y son perfectamente compatibles con una exposición de Venus.
No pongo en duda la autenticidad de los documentos gráficos:
“Me consta, puesto que conozco a Ángel Gari, que los presentes testimonios gráficos son absoluta y rigurosamente auténticos.”
Lo que cuestiono es la interpretación que se hizo y se hace de esas imágenes:
“En ellos puede apreciarse una de estas naves, emitiendo una extraordinaria luminosidad.”
Y, además, propongo una solución al caso.
Después de examinar los datos que hay sobre el suceso, mi conclusión es: ¡Los testigos vieron y fotografiaron el planeta Venus!
Este es otro ejemplo característico de cómo se investigan este tipo de sucesos. Se recoge información incompleta, a veces errónea, se da por buena la confusión del observador y se concluye que se ha visto un ovni o una nave.
Después de estar, este caso, durante 42 años inexplicado, han bastado un par de llamadas y hacer unas preguntas especificas a los testigos para encontrar la explicación correcta.