Cuando los planetas se disfrazan de OVNIs

Espero que esta entrada resulte esclarecedora para aquellos que están convencidos de que los planetas más brillantes no consiguen engañar a los observadores y, por lo tanto, no estimulan observaciones OVNI. Según dicen, Venus, por ejemplo, es tan conocido que su "insignificante" brillo no suele llamar la atención. Sin embargo, el examen desapasionado de los avistamientos muestra, una y otra vez, que los errores con astros son muy habituales en la casuística ufológica.

A continuación, voy a mostrar un incidente que pone en duda las afirmaciones que esgrimen los negadores de las confusiones con cuerpos celestes. En dicho ejemplo, la confusión resulta tan evidente y tan gráfica que no hace falta muchas explicaciones.

Nueva Andalucía, de Sevilla, publicó el día 31 de octubre de 1980 una noticia sobre la aparición, en el cielo de la ciudad, de dos misteriosos objetos luminosos. La crónica, que pueden ver seguidamente, iba acompañada de dos imágenes.

Los "extraños" objetos aparecieron de madrugada, durante varios días, por el Sureste, desplazándose con marcada lentitud. Las fotos fueron tomadas a las 6:45 horas del día 31 de octubre con los parámetros indicados en la nota de prensa.

A primera vista, ya se aprecia que las imágenes han sido tomadas con larga exposición a astros que han dejado plasmada su trayectoria ascendente durante la misma. De hecho, se puede leer en la crónica que el fotógrafo dio un tiempo de exposición de cuarenta segundos.

Haciendo una sencilla comprobación se sabrá que, a las 6:45 horas locales del día 31 de octubre de 1980, eran visibles desde Sevilla, por el ESE, los planetas Venus y Júpiter. Y, como puede apreciarse en la carta celeste, colocados en la misma posición que los objetos de la foto.

El orto de dichos planetas se produjo hacia las 4:46 horas y fueron elevándose lentamente, permaneciendo visibles hasta que amaneció.

Para terminar, transcribo los dos últimos párrafos de la crónica periodística porque no tienen desperdicio:

"Numerosas personas han llamado telefónicamente a nuestro diario, comunicando haber presenciado el fenómeno.

Puestos en contacto con el aeropuerto, no se nos ha dado explicación alguna." (la negrita es mía)

Como puede apreciarse, éste es un ejemplo palmario de que Venus y Júpiter, en ocasiones, son tomados por misteriosos objetos voladores.